Páginas

Mostrando entradas con la etiqueta Políticos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Políticos. Mostrar todas las entradas

jueves, 27 de agosto de 2015

¿Por quién votar?

COLUMNISTA

DIEGO MORA ARIZA


       PUBLICADO EL 26 DE AGOSTO 
DE 2015
 
http://www.elcolombiano.com/

Estamos a dos meses de salir a votar en las elecciones locales y regionales. Elegiremos alcaldes, gobernadores, concejales y diputados. La lista de candidatos es larguísima, más de 110 mil se inscribieron y la decisión de en quién depositar la confianza no es fácil, pues vemos que a pesar de que cada vez las formas de hacer campaña electoral se profesionalizan más, aquí seguimos acudiendo a las viejas prácticas clientelistas del “yo te pido y tú me das”.
Los aspirantes a un cargo son felices informando a sus posibles electores sobre las alianzas que han hecho con diferentes sectores, incluso con esos distantes a sus posturas pero que en época electoral se vuelven muy atractivos. Para conseguir adhesiones aquí se usa el eufemismo “acuerdo programático” cuando lo que negocian son puestos burocráticos o contraticos varios.
El candidato promedio en Colombia (es decir el 95%) se caracteriza por querer ganar a cualquier precio, acomodar sus posturas según el viento sople, negociar sus principios si acaso a la contraparte no le gustan y por olvidar de dónde viene y para dónde se supone que va o iba al aventurarse a hacer política.
Por otro lado, para muchos el servicio público no es más que un escampadero, un medio para conseguir dinero y poder. Se aprovechan del arte de hacer política para embaucar a los votantes incautos, a esos que abundan en Colombia, y convencerlos de que son la mejor opción, la del cambio, la transformación, el futuro de la sociedad a la que pertenecen. Quizás se piensan ellos mismos como unos iluminados, los elegidos por el destino (no digo por Dios para no meterlo en política) para cumplir una misión difícil pero que alguien tiene que hacer. Son unos sacrificados.
Y el ciudadano cada cuatro años cae en sus garras, les cree. Cuando los escucha hablar piensa en que este sí es, este sabe de lo que habla, se nota que ha estudiado y seguro tiene la varita mágica para sacarnos de todos los problemas. Y vota por él, sin analizar lo que le dijo, lo aterrizadas de sus propuestas, su viabilidad; luego se desentiende, pasarán cuatro años para que vuelva a interesarse.
Y así llegamos a este punto, giramos en un círculo vicioso de apatía por la política (debería ser solo por los políticos), de resentimiento por tantas promesas incumplidas y tantos falsos profetas que se disfrazaron alguna vez de candidatos para ofrecernos el cielo en la tierra. Y ellos, los encargados de dignificar el servicio público felices porque su sociedad no es pensante y vota por ellos porque le dicen o por ser el candidato de alguien, además la apatía les dura poco, quizás hasta que les reparten el refrigerio o les entregan las tejas para la casa o el mercadito.
Por último: tal vez usted que leyó esto que acabo de escribir encuentra lugares comunes y logra atar cabos con uno u otro candidato de los que por estos días recorren las calles. Esa era mi idea, ahora de usted depende que esos aspirantes a un cargo el próximo 25 de octubre que caben en esta descripción no logren salir en primer lugar en el escrutinio electoral. ¿Lo lograremos?
@DiegoMorita

jueves, 20 de agosto de 2015

La campaña que queremos II

COLUMNISTA

DIEGO MORA ARIZA


       PUBLICADO EL 19 DE AGOSTO 
DE 2015
 
http://www.elcolombiano.com/

El 28 de enero de este año, aquí mismo publiqué una columna titulada “La campaña que queremos”. Allí, en quince puntos resumí una serie de conversaciones con amigos en las que nos pusimos de acuerdo en el tipo de contienda electoral que nos gustaría ver, en especial para Medellín.
Repasando esa lista, es una lástima ver (aunque ya sabíamos que pasaría) que esos deseos no los veremos cumplidos; y eso que apenas van corridos 24 días desde el inicio oficial de la campaña.
Por ejemplo, en la lista el punto número uno era “una campaña de ideas y no de insultos”. Ataques directos e indirectos van y vienen de cada campaña. Señalamientos, pullas, desacreditar al contrario como sea. Unos lo hacen más que otros, pero ahí están todos prefiriendo resaltar los defectos del contrario que las cualidades propias.
Nuestro punto seis era “creatividad en sus estrategias de comunicación, nada de andar a la sombra de un “cacique” que le apalanque la imagen”. Por ahora se ve poca comunicación estratégica, las mismas vallas, los mismos pasacalles y mensajes muy cojos, poca profundidad en los relatos. Parece que la profesionalización de las campañas no ha llegado a Medellín y estas se siguen haciendo por intuición.
En el punto diez planteamos “que no se compren encuestas”. No tengo pruebas de que alguno de los candidatos lo haya hecho (y espero de corazón que no), pero los resultados tan disimiles entre las que hacen las encuestadoras nacionales y las locales dejan mucho que pensar. Cada campaña comparte y difunde los números que más le convienen y le quitan peso a las demás. Como sugerencia deberían solo creer en las encuestas internas que hagan y dejar las otras solo como inventario.
En el once dijimos “que no se subestime la inteligencia de los votantes”. El tema de las encuestas es un buen ejemplo. Toca creer que toda la ciudadanía traga entero para hacerle bulla a unos resultados el lunes y blasfemar de otros el martes. Un político, que además aspira a gobernar una ciudad como Medellín, debe ser una persona seria, equilibrada y coherente. No lo olviden.
El doce era “más enfoque en la realidad, tanto de la ciudad y los candidatos, y no en la percepción que se pueda tener. (Que no crean que van a ganar por bonitos o porque ya gobernaron y mucho menos porque están cobijados en una gran sombra)”. El punto lo dice todo y ver las diferentes campañas lo ratifica.
El trece rezaba “que se respete la Ley, sobre todo en los topes de gastos”. Jamás se cumplirá, pero es un anhelo que no debemos perder. Basta ver la propaganda de algunos candidatos tanto física como digital para saber que esos topes serán superados, sin embargo, como los vacíos siempre son aprovechados, muchos acuden a las supuestas donaciones u otros quiebres de la Ley y gastan más de la cuenta sin que puedan ser sancionados. Respeto señores, no olviden que como se hace campaña se gobierna.
Por último: seguimos deseando ver a unos políticos que dignifiquen la política. La lista sigue en construcción y qué bueno sería poder avanzar en la campaña poniéndole el chulo de cumplido a alguno de estos puntos. ¡En sus manos está señores candidatos!
@DiegoMorita

Visitantes